2 mar 2012
TRAS EL RASTRO INCA EN HUMAUACA
Humauaca es una población al norte de Jujuy que nos serviría de campamento base para hacer el paseo de Iruya, el cual nos habían insistido y recomendado desde que entramos en Argentina.
El día que llegamos nos quedamos en el Hostel de Humauaca (50$AR/pax) y la verdad es que no sería un lugar para repetir, pero al estar cerquita del centro nos sirvió para visitar el pueblito.
Humauaca es un pueblecillo de montaña con callecitas adoquinadas y con una plaza bastante importante.
Frente a la plaza hay unas escaleras que llegan hasta el mirador del Indio, desde donde se puede apreciar todo el pueblo.
Hay un mercadillo bastante importante donde hay frutas, tiendecitas de ropa, gente comiendo, ventas de empanadas, etc, etc...
La verdad esa fue la impresión que nos llevamos de Humauaca por lo que a la vuelta de Iruya teníamos pensado quedarnos sólo una noche, pero nos quedamos en un hostel tan agradable que decidimos extender nuestra estadía.
Esta vez dormiríamos en La Antigua (50$AR/pax), un hostel ubicado en una casa colonial y que está regentado por los nietos de los primeros dueños de la casa, Carlos y su hermana.
Carlos nos explicó las distintas fiestas locales y como cosa rara llegamos tarde para disfrutarlas, por lo que nos hizo un plan alternativo para conocer los alrededores del pueblo… Así fue como las chicas: Alba, Rebeca y nosotras, nos aventuramos a conocer las Inca Cuevas.
Con un pequeño diagrama que nos dibujó Carlos, ya que ni la información turística te indica de la existencia de este lugar; arrancamos en busca del camino que utilizaba la realeza Inca cuando se dirigía hacia Cuzco.
Nos bajamos del remis (90$AR) en el medio de la nada y teníamos que buscar un puente en forma de arco… para nuestra sorpresa teníamos que bajar un acantilado y luego cruzar un río para llegar a él… Así que caminamos un poco hasta encontrar una granjita local que nos confirmó nuestro destino :-)
Descendimos la cuesta como pudimos y cruzamos el río descalzas, porque el intento de poner piedras para ir pisando no nos sirvió de mucho, pero lo logramos y llegamos hasta nuestra primera referencia.
Después de esto las indicaciones eran muy fáciles, seguir el cauce del río más grande y al ver una casita tomar a mano izquierda…
A partir de ahí las montañas verdes se convertirían en montañas de color rojo arcilla y teníamos que continuar hasta encontrarnos con la primera cueva… los paisajes eran muy bonitos y el trayecto nos tomó 1h15, así que quedamos satisfechas con nuestro mapita casero…
En la cueva encontramos pinturas rupestres, con una antigüedad de 12 mil años, a pesar de que es interesante hay que decir que los grafitis que han ido adornando en los últimos años estas paredes dejan bastante que desear… pero bueno el paseo valió la pena.
Antes de volver decidimos parar a “almorzar” (yogures y duraznos) en un pequeño oasis verde que conseguimos tras escalar una pared roja… el sol y el calor nos impidieron acompañar nuestros aperitivos con un matecito, pero bueno igualmente el parador tenía unas vistas imponentes.
A la vuelta tuvimos que esperar un poco para que alguien nos levantara, por lo que aprovechamos el momento para practicar las chacareras… hasta que un bus se apiadó de las cuatro y nos subió en la cabina y nos acercó hasta Humauaca.
Esa noche hicimos un asadito de despedida, Carlos y Alba se encargaron del fuego, mientras nosotras con Román nos fuimos en busca de los “insumos”… Al plan se añadieron el pepas y Santino que también se despedían del norte, así que con nostalgia pero alegría de estar todos juntos disfrutamos de nuestros últimos choripanes en tierra Argentina…
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2 comentarios:
Chicas! que lindos sus relatos del Norte. Qué tal Bolivia? Las extraño!
Hola chicas. Me hizo mucha ilusión haberos conocido en persona después de seguiros tanto tiempo a través del blog. Sólo siento no haber coincidido más tiempo con vosotras porque os habría acribillado a preguntas sobre Argentina. Pero bueno,para eso tengo el blog :)
Un abrazo. Manu.
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